Los vibradores no pasan de moda, ni mucho menos. Son juguetes eróticos divertidos, saludables y seguros. Además, suponen un estímulo para la relación de pareja, aumentado la complicidad, a la vez que permiten explorar nuevas emociones.Los hay de todas las formas, tamaños, colores, texturas y con todo tipo de funcionalidades. Y es que en los últimos años se ha multiplicado el catálogo de vibradores, disponiendo hoy por hoy de una variedad más que estimulante.
Estos juguetes se han convertido en uno de los juguetes eróticos más demandados en ambos sexos y también entre las parejas. La definición de juguete sexual le viene como anillo al dedo a un complemento con el que poder hacer volar la imaginación en solitario y probar nuevas experiencias, tanto en solitario como en compañía.
Los viejos clichés y los miedos a probar cosas nuevas han desaparecido casi por completo. Vibradores de diseño, ergonómicos, con múltiples funciones, resistentes al agua, con diseño discreto o con todo tipo de formas divertidas… sólo hay que dejar rodar la imaginación y disfrutar todo lo que se pueda.
La mayoría conocemos su vertiente lúdica, pero éstos también tienen una importante parte terapeútica. Varios estudios presentan este tipo de productos como una de las mejores formas para mantener una líbido activa.
La mayoría de las mujeres que los usan muestran un interés sexual mayor, a la vez que tienen mayor facilidad para alcanzar el orgasmo, disminuyendo los niveles de tensión y estrés. También se han documentado mayores niveles de excitación entre quienes usan vibradores, favoreciendo a una mejor lubricación.
Es un compañero discreto y que nunca falla. Sirve para conocer mejor nuestro cuerpo y aprender qué sensaciones podemos llegar a alcanzar. Sólo hay que dar con el que mejor se adapte a nuestros gustos y dejarse llevar. No te arrepentirás.